NOVEDADES EDITORIALES

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En Amazon.com ya pueden encontrar, en formato E-book y tradicional, mis dos últimas obras "Las mujeres de Wagner" y "Las hadas de Bécquer y Wilde ", publicadas por LOS OJOS DEL SILENCIO .







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Cadiz, Andalucia, Spain
Licenciada en Filología Anglo-Germánica, hablo inglés, español, italiano y francés. Tengo publicados varios artículos sobre literatura inglesa en revistas especializadas así como los siguientes libros: "La magia celta según Gustavo Adolfo Bëcquer y la novela artúrica contemporánea" (Sevilla, 1999) "Camelot reconstruído" (Sevilla, 2000) "El hada blanca"(Sevilla, 2001) "Ector, el príncipe de negro" (Sevilla. 2004) "Las mujeres de Wagner" (2011) "Las hadas de Bécquer y Wilde" (2011) "El sueño de Calpurnia" (2012) "Wagner's Women" (2012) "La Triple Diosa y el rey Arturo" (2012) "Gades y Camelot" (2013) "The Triple Goddess in Oscar Wilde's Salome" (2013) "Solidaridad femenina en los romances medievales ingleses" (2013) "Calpurnia's Dream" (2014) "Magia y Eros en Shakespeare y Wagner"(2014) "El lamento de Calipso" (2014) "Kundry o la decadencia de la soberanía en el Parsifal wagneriano"(2015) "Las tres caras de Morgana y Ginebra : la psicología femenina en la literatura artúrica"(2016) "Verona, 1303" (2016)

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jueves, 24 de julio de 2008

GADES Y CAMAALOT 21


Galaaz y Ector se volvieron a abrazar, nada más tocar puerto.... Lo sintió estremecerse entre sus sólidos brazos de bronce oscuro.... Leyó, a través de sus fibras temblorosas, todo cuanto había acaecido, pese a carecer de la vibración especial que poseía la raza de este hermano mayor al que, en contra de sus previsiones, había recuperado..... Los ojos de miel oscura se fundieron con los negros y ya insondables, transformados por aquella madurez brutalmente asimilada.... que también vieron en los otros el anhelo por perderse en una barca ritual y fúnebre rumbo a.... Una pulsión celosa, por primera vez en su existencia de virgen, se hizo notar en lo más `profundo de sí.... Aquellas entrañas recién despertadas, exultantes por sentirse dueño de una feminidad tan cercana a sus propias raíces.... el mismo cabello caudaloso y negro, la tez pálida, los senos generosos sobre la delicada figura..... ¿Pudiera acaso el bastardo de Artorius y Lyle haber sospechado....? Una furia violenta y breve contra sí mismo le hizo desdeñar el pensamiento..... No, su fiel hermano no osaría.... La imagen centelleante de ella en aquel ropaje ritual que usaban sus hermanas para la curaciones solemnes, de pie ante el vientre desnudo, viril, ansioso, de Galaaz, sin embargo, seguía fijada entre sus pensamientos, igual que aquel día en el que ofreciera su ayuda a la Reina Suprema para contribuir a curarla dolencia extraña que afectaba al joven hermano menor.
La Reina Suprema.... Frente a lo que hubiera imaginado de sí misma, siempre sintiéndose inadecuada para ser una verdadera Gran Reina, Wenore....¿alguna vez llegaría a hacerse a la idea de no ser ya considerada Reina Suprema? Fue durante aquellos primeros tiempos en aquel reino de efluvios energéticos tales que se cristalizaban en vías de gemas cuya fuerza pugnaba por atravesar aquella bruma azulada que tenían por bóveda.... Sabiéndose en realidad tan sólo una ilustre súbdita de la Señora Nenyve, aquel título del que nunca se sintió digna comenzó a arañar dolorosamente su nostalgia.... aunque amase la atmósfera sutil, energética y luminosa de aquellos dominios, aquellas almenas imposiblemente estilizadas y majestuosas que se elevaban altivas en miles de delgadas facetas cristalinas de rosa, rubí pálido, ámbar, zafiro, aguamarina, esmeralda.... los colores de la tarde precipitados sobre la tierra, impregnándola.... como seres ultraterrenos, celestiales, que la fecundaran.... ¿era quizás esto lo que debía ser suyo en lo que le iba a restar de existencia? Simplemente, ser una dama de ilustre y doloroso pasado sujeta a una señora de entrañas y mirada marmóreas, carente de soberanía propia.... .... ¿Acaso la había tenido alguna vez a lo largo de su vida? Y esta realidad permanecía allí dentro.... pese a como se sentía arrebatar cada vez que los labios trémulos de Ector se llenaban con sus brazos de firme palidez aún suave, venerando sus senos que crecían como lunas, devorando aquellos muslos frenéticos que se abrían como mariposas para albergar aquella fuerza resplandeciente y dulce, tan distinta de la plenitud recia, casi brutal, que Artorius solía generar en su vientre.... a pesar de algo más allá de aquella pulsión viril que penetraba a través de sus poros, de las oquedades entre sus fibras mas sutiles, aquel ser diáfano, tan de Ector, que la llenaba toda, nutriendo y alumbrando aquel brote de vida que iba tomando forma en aquel vientre ya totalmente de él....
Sí, esto era lo que ayudaba a Wenore a trascender su descendido papel de ¿matrona sanadora? entre todas aquellas gráciles doncellas de luz mientras ella se iba sintiendo cada vez más grávida, terrena, espesa, parda.... No, sabía que Ector no esperaba ni quizás desearía, de ser posible, saciar sus deseos más profundos con ninguna de ellas, ni cuando su vientre se hiciera tan masivo que le imposibilitara su acceso a él.... Sí, tendría que hacerse a la idea.... la criatura por llegar quedaría totalmente en manos de Nenyve y Gaynour, quienes mantenían un clima de calmada hostilidad latente que no se le pasó por alto a Wenore.... Gaynour.... su hermosa y abrumadora cabellera de noche azulada pese a las vetas de plata, los jugosos labios llenos y los senos aún sensuales en el junco de su talle.... No, Ector era un hombre fiel a la única mujer que había cruzado su piel con la suya.... Todo ello le ardía dentro.... Claro que al alumbrar a quien debía venir a su debido tiempo aquí gozaría de una atención que en otro lugar de la tierra no tendría.... quizás esa luz tamizada con el color adecuado la ayudaría a sacar la vida dentro de ella sin que su añoso vientre pudiera resentirse.... ¿a cambio de que no le perteneciera más? .... Desesperadamente, había buscado respuesta en aquellos ojos profundos a los que únicamente podría recurrir... "Mi reina, a pesar de todo mi soberana.... señora de mi vida... tomadme y os seguiré.... aunque éstas sean mis hermanas y las añore con desgarro.... vos y lo que crece mío aquí dentro sois mi reino....Os quiero dueña y soberana, Wenore, mi esposa, carne mía.... llevadme donde seáis señora y dueña.... y ello me hará sentir realmente hombre.... " Ector había rodeado con sus brazos el vientre abultado de Wenore y lo había besado con hondura.... No había más que preguntar....
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Habían cruzado los senderos bordeados con altivos pabellones de luz petrificada que en la profundidad de la noche apenas si eran gigantes espectros yertos, levemente translúcidos…. Ector había sentido sus entrañas estremecerse ….Una vez más, se había preguntado si volvería a tenerlos ante los ojos….. Se había asegurado de traer consigo aquella gran bolsa y el cobertor tejidos con el cabello de intenso poder perteneciente a Blodwynn y otras doncellas que los tejieran para él….aquellos sobre los que tantas veces la plenitud femenina de Wenore se estremeciera en sus brazos…. Como aquella primera tarde sobre el manto de simples pieles corrientes que no había olvidado traerse…. Junto a su surtido de gemas heredadas de Blodwynn…. Wenore, paso entorpecido por el volumen del vientre, se las había arreglado para traerse consigo a sus damas, aquellas que jamás llegaron a adaptarse al Reino Sin Sol, consideradas seres oscuros y espesos por aquellas doncellas de porte aéreo…. No, Wenore pensaba, radiante ante la expresión viva y clara que había vuelto a ver en los ojos de Clarissant y Lynet…. Clarissant….ahora más que nunca “su niña” , perdidos los hermanos y el padre en …. Quizás debiera invitar a Margawse con frecuencia…. Margawse…. Viuda, definitivamente sola, sin más familia que su Clarissant….
sus hermanos vagando fantasmales hacia una tierra inverosímil …. Gaynour…. Por primera vez en su vida, el corazón se le había oprimido lloroso ante aquella mirada oscura y acaparadora, ahora enrojecida, nerviosa, parpadeante…. No sólo eran sus ambiciones las que se le escapaban…. También su niña…. Y aquel hijo que desearía haber tenido de Blaise…. Sí, definitivamente, sabía que estaba destinada a pagar un precio…. De todas formas, ¿por qué no volver a Camerlerd?..... era su hogar de siempre, a fin de cuentas…. Sí, quizás con el tiempo…. Nenyve y ella, desaparecido el afán que en común tenían, no soportarían mucho tiempo compartiendo el mismo suelo…. Pese a que su edad no resistiera separarse una vez más, ya definitivamente para siempre, de aquel mundo palpitante, sereno, transido de luz fecundada….
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Después de encontrarse con Galaaz, quien les esperaba con sus hombres de confianza, emprendieron travesía hacia Bretaña, donde cabalgaron hasta Saint Dunstan. Allí permanecieron con Blaise hasta que el seno de Wenore, maduro y desengañado, se abriera pletórico, dando salida a un nuevo heredero de la sangre híbrida pura, cabellera tupida y negra contrastando con el cuerpecillo de marfil … como la pequeña futura regente que surgiría a los pocos minutos, tras una labor angustiosa que se extendió durante toda una noche y una mañana, auxiliada por las incontables clases de infusiones que el buen Blaise se afanó en idear, variando el tipo de hierba y sus proporciones, dependiendo de cómo iba evolucionando la situación …. Observando a la que fuera Reina Suprema, hinchada, empapada en sus propios fluidos, sobre la paja amontonada…..la cornalina de Ector, dorado teñido de carmesí, presionada contra su seno por la mano de aquel que era ya parte de su propio ser , quien, ojeroso, transido de la agonía cérea de ella, sostenía a duras penas contra su corazón, bajo aquellos senos que tan a menudo poseyera enloquecido, la gran esmeralda que aquel día les alumbró el pasaje de sus seres sutiles hacia el mundo más allá de las sombras donde sus ancestros descansaban …. “Madre….Blodwynnn…. no la arrastres contigo….Madre….” ¿Era aquella otra Diosa Madre, la Madre del Carpintero…. La que aparecía, transida de Blodwynn primero, después de la Diosa Fecunda…. Keridwenn…. Ishtar? Madre…. Hazla vivir…. Seremos tuyos….no la abandones…..seremos tuyos……
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Cuando llegó el tiempo adecuado, Wenore decidió instalarse donde naciera y creciera como princesa, junto a las olas grises y centelleantes de Camerlerd. Allí vio a sus hijos crecer junto a su señor y sus damas, en la fortaleza de piedra que alojara con su vida con Leodegranz….y Gaynour…. Allí hicieron plantar inmensas arboledas de árboles sagrados y una pequeña capilla en honor a la Santa Madre, la Doncella que engendrara al Galileo pero que también era Rhiannon, Arianrhod o Birgitt…. Allí crearon, supervisados por Blaise, una comunidad de doncellas, instruidas para conservar la tradición de las sanadoras…. Eran damiselas recomendadas por la princesa Isolde de Irlanda, discípula de Blaise…. Allí la hija de Ector y Wenore comenzó su iniciación como sucesora de Nenyve , al cabo de varios años cuando aún era adolescente y asesorada por su padre como nuevo hombre sabio de la Tierra Sin Sol, quien, pese a todo, decidió pasar largos periodos en Camerlerd, pese a los muros de piedra, el mar gris y amortajado y el aire espeso sin luz …. Allí se había sentido, por vez primera señor y hombre, le había pertenecido una mujer con la que, en su momento, se fundiría al final del viaje en la barca ritual a través del océano…. La cual le había dado aquel hijo de mármol musculoso y ojos donde el azabache alternaba con el acero, que tanto impresionó a Constantinus, este señor de raigambre y nostalgia romanas, quien quiso formarlo como guerrero en su casa, aquella “villa” al estilo de siglos atrás ….. y que tanto le recordó a Ector a aquellas mortajas de roca y moho allí … allí en las islas …. Wenore, mi amada, carne, esposa mía…. Nuestro pequeño Malgo ….va a ser adoptado por el Rey Constantinus …. Quiere hacer de él…. un nuevo Rey Supremo …. Madre …. Blodwynn….Maryam…..dejadme vivir para ver a mi hijo conquistar todos los pueblos que sé que va a dominar…. Me lo habéis hecho saber …. Que al menos yo pueda vivirlo por ella ….
Como todas las tardes de la estación cálida, Ector había salido a la playa y se había sentado, contemplando este insólito sol rojo, inundando con los colores de su tierra sin sol aquel firmamento real que se vertía sobre las olas por las que se había alejado, algunos años antes, la nave con aquélla que para siempre sería su propio ser.

GADES Y CAMAALOT 20


La nave que llevaba a Wenore y su séquito hacia su destino, en la tierra donde la fuerza viva fluía luminosa y cristalina bajo un mar de bruma, avanzaba irremisible como aquel brote latente que se aferraba a las entrañas de ella para sobrevivir, estimulado por la propia voluntad de aquella a la que aún llamaban " mi reina".... Al contrario de lo que había sido aquella obsesión oscura durante buena parte de su existencia, sentía un violento deseo de exhibir sus pechos y vientre henchidos de vida .... aunque ya no por el orgullo de estar gestando al futuro heredero del Rey Supremo.... No, esta fuerza corpórea que animaba sus entrañas había sido forjada por aquel vínculo con lo más profundo de su propio ser, más real, sutil, tierno....hermoso....que aquel deslumbramiento pasional que una vez la uniera a Artorius.... Una punzada dolorosa la estremeció.... Artorius.....súbitamente acosado por aquel hijo desconocido, engendrado en un vientre ajeno a ella... la esposa de Bagdemagus.... aquella de los bucles dorados y masivos que tanto le recordaron a Galaaz.... y aquella sonrisa abierta y calculada como la expresión de sus ojos grises, casi plateados, con destellos de zafiro....como una vez oyera contar a su padre o quizás a Gaynour que eran los de su madre.... Nada de esto le había sido revelado aquel día.... cuando la propia Gaynour le había comunicado abiertamente lo que Artorius, el sólido y poderoso Rey Supremo de Bretaña, no había tenido fuerzas para decirle cara a cara.... Pese a que Gaynour le había ahorrado todos los detalles, ella podía leerlos en sus ojos bajos y la voz queda.... Aunque la mano de la propia dama principal de la reina hubiera desencadenado todo aquella historia, no había podido evitar estremecerse con lágrimas secas ante la voz enronquecida y tambaleante que Artorius, tenso y desesperado, intentaba dominar con frases cortantes, casi gritando.... Las finas arrugas alrededor de los ojos se habían hecho profundas.... "Mi señora Gaynour.... es una voluntad más allá de mi pueblo y de los hombres, la expresada a través de nuestros piadosos monjes y del santo Alban - Gaynour había reprimido una exclamación – que.... ..... el Rey Supremo tenga un heredero engendrado por él mismo en un vientre fértil..... a partir de ahora confío en vuestra sabiduría para que..... ....." Ella misma había tenido que completar sus palabras.... a pesar de todo...... Sí, ahora veía la razón por la que había tardado tantos años en dar este paso, pese a la presión de los monjes galileos y, consecuentemente, de Roma.... Aunque ahora gozase de un vientre creciente y terso, una cascada de olas carmesíes en las que hundirse frenético, una presencia feérica, imponente, que pudiera lucir a su lado con orgullo en las grandes celebraciones de Camaalot..... Faye... Espabilada por la brisa marina, Gaynour había despertado brevemente de sus recuerdos para dirigir sus ojos hacia Ector, mirada ausente y porte silencioso.... Faye..... sí, Gaynour sabía que un tributo debía ser pagado....¿por qué esta pobre incauta? .... Sí, debía haberlo previsto... Incluso estas damas de origen híbrido son sensibles al poder que su porte y dotes naturales les confieren.... no sólo las simples humanas.... sobre todo cuando se apoderan del ser interior de un hombre tan influyente.... Se había creído invulnerable, permitiéndose el lujo de prescindir de la discreción.... Algo que ni ella misma, Gaynour, ni Nenyve habrían osado...... Y llegaron noticias a casa del rey Bagdemagus... Todo cuanto siguió tuvo lugar en menos de un mes.... Era obvio que en la sombra Bagdemagus y su familia habían montado una red de información tupida a lo largo de varios años, incluyendo a los propios monjes liderados por Alban – todos conocían el hecho de que Bagdemagus era hijo obediente de Roma y, consiguientemente, otorgaba sabrosas prebendas a los monasterios que estaban bajo sus jurisdicción --.conectada a su vez con aquel…. ¿retoño suyo? que servía en el norte..... a fin de entrar en acción cuando llegara el momento oportuno ..... Así pues, Wenore y quienes la iban a acompañar al Reino Sin Sol casi tuvieron que marcharse apresuradamente.... Apenas veinte días para desmantelar casi veinte años de vida privada y guardar todos aquellos tapices tejidos desde la infancia y que abrigaran los muros de Camaalot desde el primer invierno de su matrimonio... aquellos inmensos arcones de castaño tallado con motivos parecidos a las líneas serpentinas y entrecruzadas que iluminaban los manuscritos de los monjes irlandeses..... y que trajera de Camerlerd junto con todas sus joyas y alhajas que, de acuerdo con las costumbres britanas, volvían a su poder en caso de divorcio o repudio…. En contra de su propia resistencia, se decidió a llevarse consigo el suntuoso carmesí brocado con granates que su padre le regalara para sus esponsales con el Rey Supremo …. No era una simple parte de la dote, sino un obsequio personal de su padre en el que éste puso todo su esmero a la hora de dar instrucciones para su ejecución, asumiendo él mismo la supervisión de aquel trabajo, que ni siquiera delegó, contra lo habitual, en manos de Lady Gaynour…. Al igual que hizo un esfuerzo de voluntad para almacenar en su equipaje aquel grueso cobertor elaborado con lustrosas pieles de fuerte pelo sedoso cuyo tono natural, un ámbar oscuro con reflejos de ocaso, las acreditaba especialmente : era el regalo de bodas de la propia Gaynour, diseñado y cosido por ella misma, al tiempo que iba desahumando las pieles con el humo de diferentes tipos de incienso mezclados con muchas clases de hierbas y flores propiciatorias para el amor y la fertilidad. Aunque bien sabía que quizás sería incapaz de volver a yacer en él.....
Artorius, como era de esperar, también debía devolverle Camerlerd, aunque su destino estuviera al otro lado del mar… Algo que podría legar a esta vida que iba creciéndole dentro mientras que
el mundo en el que se había hecho mujer y despedido su edad joven se desmoronaba de forma implacable : había tenido noticias a través de sus damas y de ….Ector ….. de que, paulatinamente, casi la mitad de los reyes y jefes guerreros que llevaban décadas jurando fidelidad al Rey Supremo se habían ido pasando a las filas de este aprendiz de usurpador que era ese bastardo jactancioso, un simple títere de Bagdemagus y su esposa, apoyados por un clero cuya ambición de poder les hacía transigir con un adulterio consentido y trazado por parte del supuesto marido cornudo . A pesar de todo, debía reconocer que no le extrañaba: Bagdemagus poseía un número más que considerable de tierras y, consiguientemente, hombres que le debían fidelidad. En cuanto a Artorius, además de un número de señores menores que le guardaban lealtad inquebrantable por muchas razones que se le escapaban, los únicos guerreros notables con los que aún podía contar eran sus sobrinos, hijos de sus hermanas, su cuñado Lot y…. el joven, encantador Galaaz , que había llevado su fidelidad hasta el punto de retar al bastardo para defender el honor de Wenore, mancillado insolentemente al difundir el bulo de que Galaaz debía su introducción en Camaalot a su relación adúltera con la propia Reina Suprema. El duelo resultó venturosamente ganado por el hermano de Ector….Ector…. Aquel nombre que acariciaba sus entrañas en lo más profundo y que se había tornado una realidad sólida dentro de ellas ….. Ector…..cuyas manos no debía estrechar entre las suyas hasta que estuvieran en terreno seguro…. Por el rabillo del ojo, contempló su mirada densa, oscura, perdida…. Tal como la había mantenido desde que despidieran aquella nave ritual, cubierta de hierbas y flores fúnebres sobre aquel sudario elaborado con cabello carmesí y plateado, el mismo que Faye trajera en su equipaje a Camaalot y que durante años había tejido su madre para que, en su momento, lo luciera como manto nupcial …. Ahora yacía aquí, albergando aquel ser inerte cuya palidez ya era casi del todo transparente…. Además de estar al tanto de lo que latía en el seno de Lady Faye , Lady Lyle era sabedora de que la sangre de origen élfico mantenía la lozanía y vigor indefinidamente en quien la ingería de forma regular …. Y allí la contemplaba alejarse, hundida en la barca funeraria coronada por aquella bandera confeccionada con el mismo tejido que el sudario, cuyo fulgor tenía la virtud de espantar a los piratas durante la travesía rumbo a las islas del confín del mundo, las que los romanos llamaron Gades, para allí fundirse con todos los de su raza que allí, latentes, se nutrían de los fluidos energéticos nacidos de raras variedades de rubí, zafiro, berilo, granate, diamante, esmeralda, topacio, aguamarina capaces de fluir sublimadas hasta solidificarse o penetrar por aquellos seres semialetargados que esperaban volver al mundo exterior cuando el tiempo les fuera propicio, bajo aquella bruma azulada que se confundía con el mar, junto a aquella gruta dedicada a la Eterna Madre Fértil, Protectora del Amor Fecundo y Sensual, Señora de la Luna Plena ….cuyo culto aún se mantenía vivo gracias a aquellos adoradores del roble que, huyendo de la persecución romana en las Galias, la propia Hispania , incluso de Britannia y otras provincias alrededor del mar que el imperio consideraba suyo, se habían refugiado allí durante cientos de años gracias a ciudadanos romanos que agradecieron sus servicios como sanadores eficaces o porque sus propios ancestros también pertenecían a tribus prerromanas…. Se habían instalado al otro lado del canal moribundo, donde se irguiera la antigua ciudad de los navegantes orientales, ya que era suelo sagrado, cruzado por corrientes de intenso poder de las que ya los anteriores habitantes se habían percatado, construyendo sus templos allí …. Y que también por entonces los monjes galileos habían captado estableciendo alguna comunidad de las que obedecían las reglas establecidas por este italiano Benedictus. A quienes se había unido algún que otro eremita solitario, como los que se retiraban al desierto en oriente, en las tierras cercanas a donde se movieron el Carpintero y sus seguidores, y que también eran hombres santos, iniciados en la estimulación de sus seres interiores para trascender su carnalidad y dejarse fluir esferas arriba en busca de aquel reino donde todo lo sutil se encuentra y comunica…. Como sabían hacerlo los adoradores del roble, gracias a las enseñanzas de los híbridos sabios….como Blaise….y él mismo. La brisa violentamente fresca y húmeda le azotó la mirada y la piel encogida, pese al abrigo de su atuendo oscuro de siempre arropado en las pieles que cubrieran su lecho en Camaalot …. Las que se impregnaron del sudor de ella, sus fluidos más íntimos…. y bien pudieran guardar algo de su semilla…. Su ser interno reseco pareció resquebrajarse : su ser de hombre podría dar fruto en aquel vientre que veneraba dolorosamente, pero era esta entrega reveladora la que podría haber marchitado la faz más sutil y pura de Ector, la más suya, aquella que moldearon primero Blodwynn y Blassey y después Blaise.
Aquella que daba vida a su habilidad con las gemas sanadoras, que ningún otro varón híbrido dominaba, que le capacitaba no ya para conocer a fondo tanto el saber de los antiguos iniciados, orientales, griegos, romanos u seguidores del Galileo, como aquel contenido en las plantas, piedras, aguas, aire y las entrañas de la tierra, sino también el conocimiento más restringido de todos, de la fuerza que corre por cada cavidad de tu ser, procedente de aquel poder matriz que impregna todo lo creado y, en el caso de su raza, de aquellos que habitan más allá de lo tangible, de cómo dominarla, engrandecerla, expandirla….hasta traspasar lo visible y entrar en contacto con la materia sutil de otros seres descorporeizados, que habían seguido el mismo sendero de conocimiento y evolución…. Era este ser único el que se había resentido quizás fatalmente de aquella plenitud breve de la sangre y la vida carnal, al que ya sentía que no podía apelar como antes en momentos de desamparo, refugiándose en quienes ya no podía abrazar por pertenecer a una dimensión más etérea …. Aquello que le hacía sentirse ajeno, hermosamente ajeno a toda aquella virilidad hosca, ruidosa y cruel que había conocido en Camaalot … “una verdadera vida de hombre” …. Su ingenuidad de entonces ahora tenía un gusto brutalmente amargo…. Como este sentirse atado como un lastre a la tierra, este efluvio de masculinidad duro, burdo, sórdido…. que le asaltaba constantemente cada vez que le arrastraba la pulsión de devorar aquellos senos avasalladores y restallantes de palidez y aquel vientre palpitante…. No era esta la barca que le correspondía …. No …. su destino debiera, sin duda, hacerle arribar al aquel puerto junto al gran templo solar y de allí ser llevado hacia la gruta de la Gran Madre bajo la cual volver a quien llevó el rostro y el amor de Aquélla ante él desde su infancia … y de Blassey…. y de su dulce hermana…. Había tallado este gesto ausente e impenetrable para ser capaz de refrenar esta oleada inclemente de lágrimas, fácilmente desbordable desde que su ser sutil, laboriosamente forjado a lo largo de su vida, se hubiera desmoronado con aquella eclosión fértil de aquella tarde. …. No obstante…. ¿qué le garantizaba que incluso perdido allá lejos, sus fibras, no estas carnales sino aquellas más luminosas, casi impalpables, profundas, pertenecientes a su ser sutil, dejarían de vibrar con esta fuerza recién nacida que generaban aquellos ojos negros, amplios …. como los de su raza? Sabía que subyacía una ternura más allá de esta urgencia aprendida a controlar, un vínculo subterráneo, trascendiendo lo tangible….incluso lo cognoscible….con esta mujer. Y le correspondía ahora mantenerlo vivo y firme, aunque sus entrañas anhelasen, doloridas, hacerle fluir lejos….hasta fundirse con aquella fuerza deslumbrante y cristalina con aquellos a los que su ser sutil siempre había pertenecido….
Mas no Galaaz … Aquel hermano ajeno a la sangre élfica, destinado a no ser conducido por una nave ritual hacia aquel refugio donde no se habría separado más de aquel brote dulce y frágil de su familia, el hermano nacido de la que en Benoic llamaban “ la Doncella de los Pantanos”, una suerte de ser espectral o diabólico que había intentado apoderarse del noble rey para arrastrarlo hacia la profundidades de su reino en el lago ominoso al que nadie osaba aproximarse. Galaaz…. al menos aquí, pese al brazo de mar que separaba Bretaña de la tierra de los francos, se sabía conectado en cierta manera a él…. la relación estrecha que pudiera haber entre Galaaz y la hermana de Artorius, aquella del cabello y ojos de azabache y la tez de alabastro, ayudaría a cimentar el vínculo…. Definitivamente reducido a la nada si Ector se hubiera dejado absorber por los flujos de poder allá en las islas…. ¿Era acaso esto, en realidad, lo que le había frenado aquel impulso de saltar a la nave y estrechar frenéticamente aquella pobre carcasa sin dejarse separar ni en su destino final…..y no aquella vibración densa, sanguínea, que hacía ya su ser uno con el de Wenore? Galaaz…. De algún modo necesitaba sentir su aliento cerca…..en Camerlerd…. Que ahora era de Wenore una vez más…. Sí, allí podrían volver…. De algún modo, Ector sabía que Galaaz iba a sobrevivir a aquella masacre que algo ajeno a esta carnalidad acuciante parecía hacerle entrever….¿pudiera ser que…..no todo su ser sutil estuviera desahuciado…. que quizás el hálito amoroso de Blodwynn le estuviera alentando desde ese reino etéreo y paralelo al mundo tangible? Aquella muralla seca, adusta, que Ector había querido construirse para sobrevivir al desgarro enloquecedor de aquellos días, pareció estar diluyéndose, dando paso a una bruma húmeda, densa, purificadora, dentro de sus ojos al filo de desbordarse…. Madre, no me has abandonado…. Me lo has devuelto, este ser mío que te debo sólo a ti…. y a Nenyve….y a Blaise y mis hermanas…. que sólo el me hará digno de suceder a Blaise como Depositario de nuestro Saber ….Blodwynn, mi amada…. Una cascada de lágrimas salobres y agradecidas comenzó a inundar su rostro adelgazado en cuanto dejó caer aquel velo que llevara en su primer viaje, mientras detrás de ella , una llanura amplia se extendía, cuajada de alaridos, entrechocar metálico de espadas y escudos…. regueros sanguinolentos….. miembros esparcidos …. Cadáveres amortajados en sus corazas de cuero y mantos con sus colores y escudos de armas, únicos distintivos para identificar aquellas siluetas, deformadas por la putrefacción y el quehacer de las alimañas …. Gawaine, Agravaine, Gareth,…. ¡¡Ywaine ¡! …. Sagramore, Isumbras…. Mas no reconoció la hermosa capa escarlata ribeteada con trenzas del propio cabello negriazulado que su madre Nenyve tejiera para su Galaaz… sí…. ¿por qué no….?Quizás incluso haya regresado a casa ….allá en el Reino del Lago…. Sonrió entre las lágrimas, mientras…. ¿era también una nave lenta de proa alta, presidida por una forma grácil, imponente, pálida y negra, cubiertos de un inmenso manto regio e índigo los senos que enloquecieron a Galaaz? ¿Era la Morrigu quien enmascaraba a Araianrhod…. o la propia hermana de Artorius , guiando al caballero yacente, la barba de oro oscuro entreverada de plata y carmesí seco, el torso amplio aún manchado de coágulos que salpicaban el manto de índigo acaparado por el gran dragón rojo, los ojos de zafiro grisazulado bajo los párpados quemados….rumbo hacia la Tierra donde los hijos de Danu dormían…. Allí donde los flujos cristalinos y ultraterrenos renovarían la vida inerte que yacía dentro de aquellas heridas…. y el regio jefe de guerreros esperaría el tiempo propicio para regresar a su reino y ser…..¿el Rey que Fue y Será?
Mas nada de esto pasaba por la mente expectante de Wenore, acariciando a través del vientre apenas prominente a la futura regente del Reino Sin Sol o al hombre sabio en ciernes que aseguraran el mantenimiento de aquel linaje que ya se encontraba al filo de la extinción. Pero aún así, no podía evadirse de la expresión inerte en los ojos del que ahora era su hombre…..Sabía que, junto a aquella ternura sólida que lo iba a vincular a ella de por vida, vibraba la pulsión por quedarse retenido en aquella barca fúnebre rumbo a la que fuera Gadir, Gadeira o Gades , refugio para los seres sutiles de la raza híbrida que una vez forjaran elfos y humanos.

GADES Y CAMAALOT19


La reina Wenore... ¿debería aún seguir llamándose así? .... Aunque de hecho lo era.... y seguiría siéndolo.... ¿....? ¿....Lo merecía? .... Sentía crujir las entrañas descarnadas de su ser interno, desecadas, desprovistas de vida, azotadas por esa culpabilidad teñida de inconfesada, tenue delicia temblorosa a través de su piel, sus senos, su cintura... recordando aquella primera taza de infusión preparada siguiendo las instrucciones de Gaynour y posiblemente Faye a fin de ir intentando reavivar el ser sutil del yacente príncipe Ector.... a quien no desvelaron como habían elaborado la cocción.... pero ni el propio Ector, experto en hierbas, fue capaz de reconocer cuáles se habían utilizado. Wenore podía evocar como al principio ella misma y Faye habían cuidado del enfermo y le habían suministrado la poción además de velar su sueño y ayudarle a ingerir algún alimento líquido como leche y miel....Sin lugar a dudas, ella misma se había ofrecido a hacerlo. Aunque la sugerencia inicial viniera de Lady Gaynour .... Y, con todo, lo había agradecido.... Era una forma nueva de sentirse inmensamente útil y, de este modo, olvidar momentáneamente su vieja frustración.... Deseaba haber tenido la libertad y destreza para poder hablar a Ector con aquella tierna intimidad de hermana, gestada desde la infancia, con la que Faye se dirigía al pobre Ector, sin olvidar el distanciamiento que sus diferentes posiciones les exigían... Faye, encantadora Faye.... Pese al sudor que levemente empapaba los rizos carmesíes recogidos y el vestido de lana parda corriente que llevaba para cuidar a su paisano, a través del cual se adivinaban sus pezones prominentes.... A Wenore le recordó aquellos primeros días de casada y como, estimulada por aquellas decocciones que Lady Gaynour le hacía ingerir para no defraudar a su señor en el lecho, tuvo que pasar aquella estación cálida arropada con varias túnicas para disimular sus senos.... Los ojos dorados de Faye estaban levemente surcados de gris..... Fue aquel encanto ejercido sobre ella lo que la movió a aceptar el quedarse a solas con el príncipe Ector ya que la dama se hallaba extenuada, según sus propias palabras y las de Lady Gaynour.... "No guardéis cuidado, mi reina.... estáis conmigo ante los ojos de vuestras damas y del resto de la corte y nadie murmurará de vos" ..... Inefable Gaynour.... Siempre lograba tranquilizar o convencer a todos.... como lo hiciera con ella para utilizar sus gemas sobre el cuerpo del príncipe Ector.... ya que era inviable trabajar con luz filtrada. Al menos se podría hacer algo, mediante el contacto de la gema con la piel.... Ante la mirada de Lady Gaynour, la reina Wenore fue probando sus gemas.... No se le pasó por alto el temblor palpitante en los ojos de Gaynour cuando, por primera vez, contempló aquel débil fulgor de la luz indirecta cruzando toda aquella multitud de diminutos cristales que conformaban la gran esmeralda, el pesado rubí, la amatista, el berilo, el topacio, el zafiro.... de raras dimensiones. ¿Acaso, por un momento, se hallaba de vuelta a casa? Ector, postrado en medio de su soñolencia, se dejó descubrir el torso frágil, translúcido, pese a aquellas sombras oscuras que el vello le formaba sobre el pecho, sobre la trama de finos músculos que contrastaban con los brazos bien formados ¿Quizás pudiera llegar a ser el hijo que Blaise no le había dado a su debido tiempo? Gaynour bajó la cabeza, temiendo que Wenore, absorta y pudorosa, descubriera sus pensamientos.... Veía temblar las manos de ella, temiendo que las gemas se deslizaran fatalmente de sus manos.... Ector yacía semiinconsciente.... de lo contrario, su pudor natural hubiera imposibilitado toa aquella tarea.... Wenore, con cautela, había depositado lentamente el rubí en el bajo vientre marmóreo y hundido, surcado por las ráfagas de vello oscuro que se prolongaban en el torso.... para después rozar la zona del ombligo con un topacio de gran tamaño que el aletargado Ector ni siquiera advirtió.... Ello la animó a seguir adelante.... Luego, la esmeralda de luz fértil y esclarecedora que posó cerca de su corazón.... el vello negro del pecho rozó los dedos finos y temblorosos de Wenore, quien hizo un esfuerzo para dominar su inquietud…. Después, el zafiro a la altura de la garganta y el berilo, que colocó en el entrecejo y la gran amatista que sujetó contra su cabeza, en el punto donde la cabellera se partía en dos. Las arrugas entre las cejas negras y arqueadas se relajaron, estimuladas por el poder procedente de aquella fuerza vital y subterránea que, en parte, era la esencia de su propia persona. Wenore, entonces, dejó fluir todo el poder concentrado dentro del ser incorpóreo que vibraba en el interior de su carnalidad, convirtiéndolo en hálito que, al traspasar las distintas gemas, se convirtió en una energía similar a la de la luz filtrada por ellas, asimilando sus matices, penetrando a través de cada uno de los centros de poder vital sobe los que las gemas habían sido depositadas, fluyendo dentro de aquel ser palpitante… Wenore…. ni su nombre le pertenecía ya….desencarnada como aquel día, junto a éste que aquí yacía…. Ector….. No, no era Ector De Maris, el hijo rechazado por la regente del Reino Sin Sol…. Era una fuerza impalpable, estimulada por el aliento vital de esta fuerza madre, generadora de resplandor vivificante, haciendo vibrar cada uno de los órganos dentro de aquel ser yacente …. Aquel fluir centelleante que era ahora Wenore creyó estar ascendiendo, una a una, cada esfera que la llevaba allí alto, donde los restos del fluir vital que alimentara a todos los seres etéreos y ultraterrenos que generaron la razas élficas se habían concentrando generando un espacio vivo propio. “Wenore…hada blanca….¿qué haces aquí?” Aquella nueva conciencia le hizo fluir más allá, sin conocer el rumbo ¿Pudiera ser que estuviera cerniéndose allá, bajo aquellas islas donde el hada romana de la muerte residía, albergando bajo su seno a la verdadera Madre y diosa de la Vida, emanando fuerza vital y telúrica procedente de todas las gemas? Sí, bien pudiera ser …. Ishtar….Luna Llena….penétrame…lléname a fondo….para llevar tu rostro ante sus ojos…. Aquella ráfaga henchida de resplandor que circulaba por todo lo que pudiera estar siendo su ser en este momento, haciéndolo pleno de fuerza femenina….pudiera también estar tomando forma ante sus ojos desencarnados ….. aquel entramado perfecto de sólidos músculos, envuelto en el nimbo de aquella mirada clara y aguda como un zafiro afilado, azul celeste, de transparencia deslumbradora …. Cernunnos ….. ¿acaso el dios de la fertilidad tomaba la forma de Artorius ante ella? … o era quizás su propio marido quien la había adquirido la imagen divina y fecunda para Wenore, iluminado por una compasiva diosa de la vida….aquellas manos fuertes y amplias….que tan a menudo abarcaran sus senos anhelantes….se enredaban, frenéticas, en una marea….de rubíes hilados, hebras rojas….carmesíes….restallantes….albergando una espalda larga, estilizada y marfileña, que intentaban estrechar, temblorosos, aquellos fuertes antebrazos oscurecidos, de vello hirsuto, acostumbrados a blandir la espada….La barba de viejo oro áspero que se hundía entre aquellos pechos gráciles de alabastro, descendía hacia los muslos serpentinos….jadeando sobre aquel cobertor hecho con lomos de zorro rojo que Wenore una vez cosiera y cepillara primorosamente para obsequiarlo a su marido en una de tantas fiestas de Año Nuevo que vivieran a lo largo de su matrimonio….No, no, era ella, Wenore, quien representaba la figura de la diosa fértil ahora ….no podía ser….¡¡madre!!.... Un alarido silente minó sus entrañas desmaterializadas …. No, yo debo ser el caldero de Keridwenn para él en este momento…. Me lo has hecho ver…..¿Por qué me muestras esto? …. Wenore pudo distinguir bien los rasguños sobre la espalda bruñida y ancha que ella misma le había causado semanas antes, durante el acceso de abandono jadeante y excitado que su último encuentro había producido….¡¡ madre!! …. Un desafío violento
y mudo había surgido de su interior….Si me has investido de tu luz, tu fuerza vivificadora….¿ante quién he de llevarla?.... Parecía que la presencia invocada se le manifestaba ….¿Gaynour?.... los ojos de almendra negra, penetrantes, entre la palidez resplandeciente y la marea negriazulada como una cabellera…..o la señora que regía aquel lago fantasmagórico al otro lado del mar…. Mas era éste un fluido vital varonil aunque virgen, dulce…. Que se apoderaba de todo su ser, súbitamente sólido, devorando su estremecida piel perlada, sus senos henchidos y anhelantes, abrazándole, como hiedra tupida, la cintura y las piernas que se abrían para recibir dentro a aquel que definitivamente llevaba el rostro de Cernunnos para ella.
Wenore…. Sin saber si aún respondía a ese nombre….siguió allí tendida….Gaynour había desaparecido…. Pese al calor asfixiante que se estremecía dentro de ella y al sudor esparcido por su piel, se tapó ansiosa con el cobertor de pieles que cubría el jergón….y a aquella sombra a su lado, la misma que había sentido sólida dentro de sus entrañas poco antes pero que ahora parecía cercana a una nueva postración, si bien sus ojos, al volverse hacia ella, eran vivos, radiantes, sin la huella fúnebre que los sombreaba…. Incapaz de rozar con sus dedos ahora tímidos lo que sus manos ansiosas habían abarcado hambrientas poco antes…. Sin embargo, necesitaba rodearla con sus brazos y estrecharla contra su pecho, protegerla, calmar aquella desazón que veía en sus pestañas temblorosas, acariciarle el cabello deshilachado por sus propios dedos…. Saboreando una extraña ternura, ajena a cuanto conocía de los sentimientos humanos hasta entonces….¿era esto ser una misma carne?....¿podría osar pensarlo cuando tenía a su lado a la propia Reina Suprema, esposa del rey Artorius?.... Mas…. cuánto tiempo seguiría siendo considerada como tal …. Él bien lo sabía…. Lo había tenido ante los ojos durante su delirio….en uno de esos momentos que, entre dos estados, su raza estaba dotada para entrever cosas que tenían lugar alejadas en el tiempo y el espacio ….Aunque ya lo sabía desde antes….sabía que estaba planeado que la semilla del Rey Supremo fructificara en el seno de una descendiente del maridaje entre un romano y un elfo femenino de los bosques , las que llamaban damas verdes ….a fin de que un híbrido pudiera ocupar el trono de Bretaña. El repudio sería simple cuestión de tiempo…. Su pulso se había acelerado…..Sí, ansiaba llamar esposa a esta mujer que se acurrucaba a su lado, aunque resultara ser definitivamente infértil…. A fin de cuentas, él jamás se había forjado ilusiones sobre su propia descendencia….sí, a medida que los segundos avanzaban, a Ector se le iba desvelando aquel vínculo con ella que jamás se le había mostrado hasta entonces pero que existía desde tiempo atrás, quizás desde antes del momento en que se vieran por vez primera en los aposentos del propio príncipe en el Reino Sin Sol…. Era una ligazón casi telúrica, sólida, oculta….como las moradas subterráneas de aquellos de los que su raza descendía….Wenore….hada blanca….alma de sus propias fibras, frágiles e inciertas…. ¿era ella una manifestación de la diosa madre fértil tal como la había contemplado durante aquella unión entre la ensoñación y lo tangible?.... pudiera quizás…. ¿Blodwynn? …. ¿Se habría manifestado a través de ella para hacer de él un hombre seguro de su virilidad?....No, se negaba a admitirlo de esta mujer cuya espalda tenía ante sus ojos, levemente estremecida, conteniendo el sollozo…. ¿Estaba destinada a ser un simple medio que sirviera a los intereses de Gaynour, Nenyve, Blaise o quien fuera….? Súbitamente entre los pensamientos de Ector se volvió a formar la imagen de su hermano semidesnudo expuesto a la visión de Wenore, siguiendo un plan previamente concebido por su madre Nenyve, esperando así hacer fecundo el vientre de ésta a quien el mismo Ector anhelaba llamar suya…. Sonrió de nuevo, recordando lo que había sabido recientemente sobre Galaaz y su incipiente relación con la viuda Morgaine, la hermana del Rey Supremo y madre de Ywaine , con quien había intimado de forma especial….Sí, su hermano se había trabajado un lugar sólido por sí mismo allí en Camaalot….había causado además una gran impresión tanto al Rey Supremo como a sus sobrinos….Morgaine…..la había visto alguna vez y sus latidos se habían acelerado….aquel cabello color cuervo, la tez de alabastro, la delicada silueta, los ojos nocturnos…..
-Mi señora …. – Ector había rodeado la cintura de Wenore con sus brazos y había hundido el rostro en el vientre de ella, más como señal de adoración que buscando saciar aquel deseo que volvía a brotarle dentro de las entrañas….Las manos estremecidas de ella, el pulso batiéndole las venas a fondo, se adentraron en el cabello negro con el que el de ella se fundía…. A través del estremecimiento de la sangre en su interior, él leyó como Wenore luchaba contra el impulso de entregarse a sus labios de nuevo y volver a abandonarse a aquella fuerza fecunda, ultraterrena…. No necesitó cruzar sus ojos con los de él ni decir palabra alguna para expresar nada más….ambos sabían que era inútil intentar, a toda costa, salvaguardar la fidelidad, momentáneamente interrumpida, al Rey Supremo …. Sin embargo., ahora los dos eran del todo conscientes de que eran parte de una trama más allá de estos sentimientos recién engendrados en su seno.
-Mi señora y reina….dejemos que el príncipe Ector descanse….

jueves, 3 de julio de 2008

Gades y Camaalot : 18

¿Quién mejor que Faye...? Obviamente, no se le podría adelantar nada con toda claridad. Debería ser algo en lo que interviniera casi inocentemente.... no era -- al menos, eso parecía – tan manipuladora y ausente de escrúpulos como otras personas de esa raza que había conocido....
Era como todas las doncellas de aquel reino bajo la bruma azulada, limitadas a vivir allí desde su nacimiento y hasta la edad adulta, recluidas entre pabellones de luz cristalizada y matices de gema, reducidas a ser adiestradas en la sanación con piedras preciosas, luz y hierba así como a explorar el canto y la interpretación musical desde todos los puntos de vista que les fuera posible....¿sería capaz de traicionar la confianza de su anfitriona....? No, algo debe hacerse enseguida para que no se retraiga... Además, es una virgen.... inexperta... y un cuerpo tan delicado.... nada de las curvas pronunciadas que excitarían apresuradamente la sensualidad más primaria.... Por otra parte..... él es un hombre vigoroso, experimentado, con unas necesidades físicas rozando la brutalidad... pero ella es sabia.... ese conocimiento sutil y profundo que da la herencia híbrida la capacitará para explorar a fondo y con sabiduría cada punto de su cuerpo a fin de apoderarse de sus sentidos .... aparte de que cuenta con su voz y su arpa.... El arpa tallada con madera de sauce, el árbol élfico, de cuerdas elaboradas con sus propios cabellos trenzados.... y esa voz adiestrada desde casi niña para trabajar cada nota musical al mismo tiempo que su garganta y el interior de su boca eran iluminados con la luz transida a través de la gema correspondiente, para después intentar hacer vibrar el entramado cristalino que había en ellas entonando cada una de esas notas estudiadas a fondo.... Y es tan regia, una verdadera Dama de los Bosques como las que enloquecieron a tantos señores en el pasado.... Sí, sería preciso a partir de ahora vigilar su cuerpo, cuando pudiera mostrar señales de que se hallaba en un día de máxima fertilidad.... Habrá que prestar atención a ese aura que a veces se les manifiesta con cierta nitidez.... Por cierto, la luna ya está terminando de crecer.

Gades y Camaalot: 17

No...Gaynour no había previsto esto.... Ector había sido hecho yacer en aquel lecho de paja, tan opuesto a aquél que bien pudiera haber sido tejido con nobles clases diferentes de cabello impregnado de sutil vigor y fuerza iluminadora que convertían el sueño en un fluir casi etéreo, nutriente.... Acompañada de Faye y, ocasionalmente, del confuso Galaaz, lo contemplaba en letargo, a veces postrado y con la mirada perdida, muy lejos del contenido Ector que viera la primera vez.... Los surcos entre la nariz y la comisura de los labios se le habían acentuado.... Nadie murmuraba arrepentidas palabras de lamento.... Sólo las entrañas incorpóreas de Gaynour se estremecían en un diálogo mudo....Ella misma había urdido aquel plan... A fin de cuentas, sólo contaba con Ector para llevarlo a cabo.... y debía ser él, de todos modos, ya que....por otra parte, Lady Faye....además de pertenecer a una raza menor, por muy experta que ella también fuese en ese arte sanatorio, ya tenía asignado un cometido en la corte... Obviamente, no podía ser ella.... Ector.... El ser interior de Gaynour podía evocar la reacción de Nenyve, una vez olvidada la zozobra de aquel alumbramiento primerizo, que resultó ser el único, ante aquel manojillo de sangre híbrida pura masculina, pálido y frágil, del que jamás conseguiría un señor de la guerra que asegurara la defensa de sus dominios ni tampoco una futura regente para garantizar el linaje.... Se imaginaba cuáles habían sido las expectativas de la joven Nenyve el día en el que se emparejó ritualmente con Ban de Benoic, a quien Gaynour se figuraba tal como sabía que eran los grandes jefes guerreros.... En su lugar, ella era capaz de reconocer otros rasgos en la fisonomía yacente allí abajo : los negros ojos de almendra, abarcadores, la cabellera color cuervo con destellos casi azulados, el alabastro en la piel ahora casi transparente....de Nenyve, de ella misma, de la propia Wenore....y de Blaise.... .... Sus pensamientos latieron al mismo ritmo que los latidos e su corazón...no.... Ector, a fin de cuentas, había sido engendrado con sangre regia....de aquella raza superior de híbridos nacido del emparejamiento entre humanos -- en muchos casos, quizás la mayoría, romanos ocupantes de Britannia ; bastantes de ellos, soldados violadores - y aquella raza con aspecto de mujer pero de naturaleza más cercana a los ríos, lagos, bosques, grutas, mares.... y además gozando de unas prerrogativas que los simples humanos no disfrutaban, al haber sido engendrada por la fuerza telúrica que impregna las capas más profundas de la tierra, dotándola de una percepción, sensibilidad y capacidad de acción muy superiores a las limitadas facultades de la simple raza humana. Pero además existía otra especie generada por aquella energía que yace más allá de la tierra, capacitada para ascender hacia las esferas más elevadas....una fuerza sublime casi rozando lo que los humanos llaman "hálito divino"....Estos seres a los que en Hibernia sabiamente llamaban "la aristocracia", "los señores", de quienes se decía que eran altos, esbeltos, terribles, imponentes, montando etéreos corceles blancos y negros, como su tez y pelo...."daoine sidhe".... Aquel pueblo del que las leyendas contaban que, acosados por los hombres, tuvieron que refugiarse en sus palacios subterráneos y en el fondo de los mares y lagos.... y del emparejamiento entre miembros de este linaje y romanos, britanos e incluso hibernios de alcurnia había surgido la raza híbrida pura, ya para entonces tan escasa que sólo le quedaba un hombre sabio para velar por su bagaje de saber.... y éste iba a ser su heredero.... sin hermanas que sucedieran a Nenyve cuando ésta fuera trasladada en la nave ritual a través del océano hacia la islas del confín del mundo.... Faye, sentada junto al jergón, estrechaba la mano pálida e inquieta en las suyas, casi transparentes, donde surcos azules y malvas fluían hacia los dedos inverosímiles, serpentinos, diseñados para pulsar una arpa inspirada por un saber no desvelado... la inquietud creció dentro de Gaynour ante los ojos verdes cuyos destellos dorados se habían hecho opacos, carentes de vida... No, no hay cuidado: ella es una hermana para él.... La intranquilidad, no obstante, persistía.... Todo tenía que llevarse a cabo, no había otra opción, de forma acelerada... De lo contrario, un día u otro este intruso ... no, no conocía su nombre, tan sólo su origen y el vientre donde el incauto Artorius depositara su simiente años antes de que la casi adolescente Wenore entrara en Camaalot de la sabia mano de la propia Gaynour.... Lyle... La evocación del nombre aún carcomía su ser interior.... a fin de cuentas, era a Lyle a quien le hubiera correspondido heredar Camerlerd de su padre Leodegranz y, quizás, haber ocupado el Trono Supremo de Bretaña....y dar herederos a Artorius .... Sí, parecía que era cierta esa teoría de que todos tenemos un destino ineludible.... Lyle....Ya había reconocido en ella la cabellera de la difunta reina Eleanor, aquella cascada de anillos dorados - tan parecidos, por cierto, a los del joven Galaaz - en aquella gran corte de vísperas de Samhain, cuando el rey Bagdemagus vino a prestar consejo al Rey Supremo, como era habitual entre todos los señores y reyes asociados a Artorius, acompañado de su esposa ....y de Triamour....la hija de Lyle, envuelta en diminutas trenzas donde el ámbar se entrecruzaba con el carmesí de Lady Faye, piel y silueta cristalinas, aquellos ojos de oro, dulcemente afilados.... Un golpe gélido galopó por las venas de Lady Gaynour....¿por qué había tenido que elegir aquel atuendo, aquellas olas como si tejidas con cabello noble de oro y rubí donde miles de gemas inverosímilmente diminutas habían sido enhebradas? Wenore había sido consciente de cómo madre e hija la habían contemplado y del modo en que Triamour había calculado atraer la mirada del rey hacia su persona, aderezada con aquella voz minuciosamente estudiada con vistas a intensificar cuanto de argentino y armonioso pudiera haber latente en aquellas cuerdas vocales....de acuerdo con la mismas pautas seguidas por las doncellas del Reino Sin Sol.... Ello había sucedido justo durante la gran corte posterior a aquella de mediados de verano de la que Wenore se había ausentado debido a una de sus crisis producidas por la evidencia de su incapacidad para concebir.... y había visto por primera vez a Lyle adulta….quien no perdió tiempo para entablar una animada, incluso confidencial, conversación con otras damas de Camaalot, aquellas que Wenore no había aceptado en su entorno más íntimo…. Sí, Lyle ya estaría bien informada sobre todo el asunto….y en la siguiente corte, la presencia lozana, luminosa y astuta de Dame Triamour ….. Sí, no había duda de que Gaynour tendría que pagar por el pasado …. Pero no su pequeña Wenore…. no…. Supo que debía acudir a Blaise, de quien sabía que por estas fecha se hallaba en el monasterio de Saint Dunstan, donde el solía pasar la estación cálida, trabajando en comunidad con monjes galileos de origen irlandés y descendientes de los adoradores del roble…. Como sabía que las damas jóvenes de la reina podían hacerse cargo de ella a la perfección debido a la confianza y afecto que existía entre ellas, se puso en camino. Una vez más, a nadie extrañó su presencia allí ya que era habitual que hiciera acto de presencia cada año, ya que Gaynour precisaba de la ayuda de Blaise para asesorarla en materia de hierbas medicinales y otros conocimientos necesarios para su vida en Camaalot. Era allí donde también tenía noticia de los suyos, allá al otro lado del mar….pese a Blassey y Blodwynn, ya inmersos en las entrañas de la tierra, allí en las islas del confín del mundo…. No, jamás podría expresarlo ante Blaise, ya que ella aún se sentía incapaz de perdonar a la madre de él por haberla desterrado a Camerlerd para convertirla en amante del rey Leodegranz, privándola de todo el poder que las doncellas de su raza ejercían en la Tierra Sin Sol…. ¿por qué ese interés en que Nenyve no tuviera rivales?.....Si, ellos, Blodwynn, Nenyve y el propio Blassey habían sido testigos de aquella vibración, más allá del acero y el azabache, que palpitaba en los ojos del joven Blaise, la cual ella incluso ahora podía descubrir en estas entrevistas anuales de estos dos seres maduros que compartían tierra, pasado y cultura …. Nenyve…. La mente de Gaynour una vez más especulaba con el dudoso parecido entre Ector De Maris y el rey Ban de Benoic ….. pero regresó al momento en el que transmitió su inquietud a Blaise…. Quien también recordó aquella fuga de Lyle…. Lyle, a quien la conciencia culpable de Gaynour había enviado a los dominios de Nenyve para ser educada en un saber vedado a los puramente humanos….ya que la sangre del rey Leodegranz tenía una buena proporción de herencia élfica procedente de la raza más pura, razón por la que en su día Gaynour había sido enviada a Camerlerd ….. Ella había confiado en este aspecto…. Pero el lado humano, básicamente especulador, prevalecía en la joven advenediza, quien, en cuanto la edad y su capacidad de seducción lo hicieron posible, intentó sacar el mayor partido a su patrimonio físico y mental, logrando escapar furtivamente del Reino Sin Sol con su amante híbrido – uno de la raza menor, de cabello carmesí y dorado y ojos de ámbar – y un tesoro de gemas sanadoras, con las que deslumbró, junto a sus dotes naturales de seducción, al propio rey Bagdemagus, quien la desposó de inmediato, ignorando que su vientre ya estaba fecundado. Todo esto le fue desvelado a una pensativa Gaynour por Blaise, quien sabía que algo más quedaba por desvelarle.
- Mi señora ….¿ignorabais acaso que Bagdemagus tiene un hijo poco menor que Triamour, sirviendo a las órdenes de un señor del norte….? Uno de mis hermanos de Saint Dunstan, que también ha sido confesor de la reina ….
- Aidan….--Le interrumpió Gaynour con ansiedad – La presión de los galileos le olvidó a abandonar Camaalot.
-- ….tuvo que ir a casa de este señor para recoger a otros hermanos que deseaban unírsenos….mi señora….el porte guerrero del joven….su mirada gris y azul ….la musculatura….. – Gaynour, ensombrecida, no necesitó más palabras….Sí, Lyle guardaba una baza más además de este vientre virgen, fresco y prometedor de sanos herederos que era esta hija suya. Sí, debía buscar un remedio definitivo para la infecundidad de su niña Wenore …. El antiguo saber que no podía practicar aquí en Camaalot …. Y además de estimular su fertilidad, poder despertar esa habilidad sanadora heredada de su raza y, de paso, reinstaurar el linaje de reinas sanadoras en Bretaña.
…. …. Ninguna de las dos cosas iba a dar frutos, tal como veía ante sí …. Además de esta pobre sombra salida de las frías entrañas de Nenyve, al que ni siquiera se le permitía satisfacer sus necesidades más íntimas…. Mas sí…había una vía abierta….aunque no lo que había esperado desde un principio…. Los ojos de Gaynour aún tenían ante sí aquella cabellera destrenzada, violentamente carmesí, cayendo sobre las manos casi serpentinas e ingrávidas que estrechaban aquéllas masculinas y pequeñas…. ¿Y si la fuerza sutil reproductiva de Wenore no fuera compatible con la de su marido pero sí con otro tipo de vibración masculina?.... Por otra parte….Faye…..es una híbrida menor, de una vibración sexual menos delicada que la de los híbridos puros, más próxima a la de los puramente humanos…. Gaynour recordó aquellas leyendas contadas entre los suyos sobre los híbridos inferiores que mayoritariamente cayeron presas de las ondinas, siendo arrastrados al fondo de las aguas, un peligro que esquivaron los híbridos puros al ser espíritus menos groseros…. Sí…. Aún pudiera haber un camino….

"Gades y Camaalot":16

--Mi reina y señora.... como quizás hayáis vislumbrado en lo más profundo de vuestra intuición y sabiduría profunda, hay una fuerza vivificadora, fértil, que ilumina todo lo que existe... Este poder es intensísimo, de variados matices que desde tiempos remotos los humanos han personificado... para muchos, Lugh era la fuerza del azul puro que vemos en el berilo y el zafiro, las distintas caras de la Diosa, que es, a su vez, Soberana de la Sabiduría y la Muerte, eran fuerzas que oscilaban entre la plata y la palidez de las perlas y el color de la flor de lavanda..... También conocían otras corrientes de poder que relacionaban con el verde y el rosado y estaban vinculadas a formas de la Diosa Madre como Arianrhod o Rhiannon. Más allá se encontraba una fuerza más tangible, carmesí, ungida de todo el valor de los grandes guerreros y la sangre derramada por miles de ellos .... ..... y otra dorada, a veces levemente teñida de coral, esclarecedora de la inteligencia terrena .... todas estas clases de fuerza que, a su vez, han nutrido las fuerzas vivas ultraterrenas que habitan la moradas subterráneas, se llegaron a condensar en masas cristalinas cuyo poder oculto variaba según su pureza, la complejidad de su estructura y su diafanidad al captar la luz dentro de sí.
-- Entonces.... el rubí es mucho más poderoso que el granate, la esmeralda más que el jade o el cuarzo verde, el zafiro más que el berilo.... – Los ojos de Ector asintieron con satisfacción mas nada sorprendidos. Allí se hallaban, ajenos a las damas de compañía, a las que Lady Gaynour había encargado una serie e ocupaciones domésticas que las mantuvieran fuera de la cámara real. Wenore había logrado vencer su inquietud. Después de todo, Lynet y Clarissant eran muchachas discretas, dignas de total confianza.
-- Así es, mi señora.... – Ector sostenía entre sus manos pequeñas una gema que le sobresalía entre los dedos, de un resplandor que Wenore pensó que procedía de aquellos bosques y lagos poblados de fuerzas animadas, etéreas, inquietantes... – Esta esmeralda es una gema especial para mí.... quizás porque estaba vinculada a la diosa Bleodewedd... o Blodwynn..... Sabéis, mi señora.... la mujer-flor, la doncella que Gwyddion creó con flores para el Dios del Mar….
–....y que fue castigada por infidelidad, siendo transformada en lechuza.
–....animal, también, de la diosa griega de ojos verdes, patrona de la sabiduría y de los olivos.... Símbolo de muerte pero así mismo del conocimiento....el tercer rostro de la Diosa Madre.... Todas son la misma, mi señora.... Ishtar, la Madre del Carpintero, la Virgen, Madre y Hechicera de los adoradores del roble.... – La pausa se hizo entre ellos....
- Señora... – Sin esperar respuesta, Ector buscó un soporte.... sus ojos recorrieron toda la habitación.... sus entrañas se habían agitado extrañamente…. más allá de sus previsiones….¿era esto lo que Gaynour había esperado de él…. y de la reina? Sí, inevitablemente estaba abocado a afrontarlo todo…. Creyó entender todo lo que le aguardaba en los años por venir y lo aceptó. De pronto, los ojos de la reina, quizás la misma luz oscura y triste de los de él, parecían haberlo captado. Wenore ofreció sus pálidas manos par albergar aquella fuerza dura, que destellaba poder vivificador…. La gran fuerza esmeraldina y centelleante se elevó por encima de sus cabelleras sobre aquellas cuatro palmas estremecidas, brutalmente penetradas por el pleno sol de aquella milagrosa mañana otoñal…. derramando un fulgor caudaloso y verde que se fundía con los destellos de azabache y azul del pelo, haciendo rutilante el atuendo opaco y oscuro que ambos llevaban puesto, haciéndose ahora ligero, como si trocado en aquellas túnicas que parecían de cabello tejido. Wenore sentía la presencia de Ector junto a ella, mas su cuerpo cansado se había vuelto casi etéreo ¿Como aquel día en la Tierra Sin Sol? Aquel clamor de luz esmeraldina le recorría las venas, todas sus cavidades y poros, apoderándose de su vientre yermo y sus senos, de su visión mas no de su conciencia…. Supo que a su lado latía una fuerza resplandeciente, superior a ella…. Se sintió reconfortada…. Sabía que él estaba presenciando lo mismo que ella: aquellas olas batientes, de un azul restallante tan ajeno al gris tierno y plateado de sus playas en Camerlerd, filtradas con aquel viento cálido que estremeció aquella onda vibrante que era el ser incorpóreo de Ector ahora…. De algún modo, percibió el camino junto al mar donde las lápidas funerarias se alineaban…. No, no era allí…debían ir más allá….más allá de las villas cubiertas con rotos sudarios de roca, moho y mármol marchito, de los “compluvia“ fangosos…. Allí en la isla de enfrente, al otro lado de aquel mar diminuto que comenzaba a estancarse por falta de tráfico marítimo…. L e estremeció a Ector captarlo todo tal como si lo estuviera viendo con sus ojos físicos…. Demasiado tangible….al contrario de lo que hubiera esperado…. Sí, al frente, junto al acantilado rocoso sobre el que se alzaban las columnatas moribundas del templo de Diana y de otras deidades, tanto romanas como aportadas por los navegantes orientales, justo a los pies de las columnas mohosas y desportilladas del templo de Venus sobre la escarpada pendiente, el canal que comenzaba a empantanarse se fundía con una extensión azul, brumosa, como el firmamento sin sol de su tierra…. Diosa….Madre….¿por qué esta lucidez?.... Allí donde se unía a la roca ocre y porosa, donde se filtraba aquella corriente brumosa y azulada dentro de aquella gruta donde la fertilidad y la luna fueron veneradas….donde la fuerza fértil y luminosa fluía en surtidores de poder procedente de la sangre, la magia verde de las arboledas y los crepúsculos donde la fuerza malva de los seres etéreos ultraterrenos se funde con la rosada de las ninfas del alba….¡¡Madre!! ¿Era Ishtar, Astarté….quien se erguía al fondo, entre aquella red de fluidos esplendentes que se fundían entre sí….? ¿Pudiera estar rodeada de un aura nocturna donde el centelleo azul y plateado parecía fluir de una cabellera, la misma que él, de pequeño, había visto tejer, ensartada con amatistas y berilos diminutos…..? Las lágrimas de hombre se agolpaban invisibles dentro del brote de energía que Ector era en ese momento….sollozando en silencio por carecer de rodillas sólidas para caer de hinojos, por no poder sentir su magra solidez de siempre a fin de desmoronarse en aquel abrazo… No, pese a todo, era aquella una fuerza cálida, abrazadora, que bien podría haber acariciado su cabellera crecida y negra, reconocido en los ojos gemelos de los de ella a aquella criatura para quien desempeñó el papel de madre que una frustrada Nenyve no tuvo fuerzas de afrontar….Blodwynn….mi Blodwynn….Ni siquiera le embarazó que Wenore pudiera estar contemplando su fragilidad…. A fin de cuentas, ya sabía cuán inerme él podía llegar a ser….Madre….déjame quedarme aquí….la reina…. Sí, sabía que tenía que hacer lo que le estaba destinado…. ¿dónde?.... ¿Por qué ….tener que depender de alguien que….?¿Era acaso esto parte del plan trazado para Wenore en su reino? A él le correspondía instruirla como reina sanadora…. No, eso era cuanto debía saber ella, pero…..“¡¡¡Blodwynn!!!” No hubo respuesta a su alarido silente, desgarrando las fibras íntimas de su ser desmaterializado ¿Era …. tan sólo aquella vibración tenue, creciente, de aquella fuerza sinuosa, fluida, ondulante….acaso unas caderas plenas y unos senos henchidos de fertilidad….difuminados ….quizás un recipiente….una cáliz…..o el caldero fecundo de Keridwenn? ….“Quien bebe mi sangre, tendrá vida eterna…..” …. …. Las palabras que una vez leyera en un manuscrito perteneciente a Blaise se alejaban fundidas con aquella sombra femenina, tenue, de resplandor fugitivo…mientras su propio ser desmaterializado se le escurría….un centelleo esperanzado se avivó en su interior…. Madre, déjame disolverme aquí, dentro de ti…. Su propio eco parecía volverse hacia sus entrañas, ahogándole, aprisionándole en un impacto de gravidez descendente….
- Mi señor Ector…. – La reina Wenore, sus manos aún en la gema ya descendida, contemplaba, a través de sus ojos físicos ya recuperados, aquel temblor borroso, perdido, en la mirada del hombre que tenía delante…. la nariz aquilina adelgazada, las pestañas densas casi fundidas con la sombra grisáceas bajo los ojos…. ¿quizás más de una hebra descolorida entre la barba escasa?.... incluso los labios llenos habían perdido fuerza….sólo la palidez permanecía intacta…. El negro de los ojos se había tornado inquietantemente profundo, perdido ya el rastro de juventud que les quedaba…. como todo cuanto había de Ector ante ella, un hombre súbitamente adentrado en la edad madura, quien, en su interior, rogó a aquella sombra cerniéndose allá lejos que le diera entereza para no derrumbarse en brazos de la reina, buscando el refugio que aquella misma sombra luminosa no había podido ofrecerle.

viernes, 27 de junio de 2008

Gades y Camaalot 15

--Mi reina y señora.... – Wenore contemplaba, con una expresión muy parecida a la nocturna y afilada que tuviese ante sí antes, la súbita aparición del joven en sus aposentos. Más asombro que ira envolvía la presencia extrañamente serena de Ector : los ojos de la Reina Suprema, inicialmente contrariados por aquella irrupción en su intimidad, ahora mostraban desconcierto.... Obviamente, había sido la mano de Lady Gaynour la que había guiado al joven hacia la estancia privada de la reina Wenore, aquélla donde los ojos de Ector buscaban disimuladamente los tapices sin éxito.... Aunque se guardó de decir nada, ella podía leer en los ojos negros, rasgados y penetrantes de enfrente, que habían captado el estado de postración tan habitual en ella desde tiempo atrás y que llevaba días doblegándola, acelerado por una muestra más de su ineptitud para engendrar pese a aquel encuentro precipitado y tumultuoso con el Rey de aquella noche.... No, su ejercitada contención la había capacitado para contener la avalancha de lágrimas retenida tras los párpados y mostrar ante su huésped la presencia de una Reina Suprema.... ¿auténtica?
-Mi señora y reina…. -- ¿Cómo podría iniciar la labor que veladamente se le había encomendado? Era ésta la función que iba a desempeñar en Camaalot…. Se había tenido cuidado en que se le viera acompañado de Lady Gaynour cada vez que se encaminara hacia los aposentos reales. Ya `para entonces Ector era del todo consciente de la confianza en grado extremo depositada en él por aquella dama que había ejercido como tutora de Wenore casi desde el mismo instante en que la joven y desventurada soberana falleciera durante el alumbramiento de la pequeña primogénita engendrada por el rey Leodegranz en aquel seno de estrechas caderas…. Una damisela rubia de cutis rosado, pensaba Ector con asombro ante la presencia pálida y menuda de la reina coronada con aquella marea de finas trenzas negriazules…..
- Señora…. – Ector sabía que no le estaba permitido esclarecer las razones que le habían llevado ante la presencia de la reina, ni aún haciéndolo en nombre de Lady Gaynour…. Ello no haría más que generar una muralla de resistencia por parte de Wenore…. Ésta, por su parte, dominó su irritada impaciencia: si la mano de Lady Gaynour estaba por medio, era inútil resistirse. Habría tenido que desarrollar una estrategia muy elaborada, quizás bastante por encima de las facultades de las que ella se sabía poseedora.
-- Mi señor Ector…. Me siento extremadamente agradecida ante vuestro interés por mi salud…. Veo que me habéis extrañado a la hora de la cena….— Wenore ignoraba que Ector jamás bajaba a romper su ayuno a la gran estancia, entre otras razones porque jamás se le ocurriría compartir el venado y la cerveza de sus compañeros de mesa…. Era su hermano quien, acompañado por Lady Faye, se las arreglaba para conseguir algo de queso recién cuajado y compota de frutas así como intentar lograr que en las cocinas le preparasen algunas raíces cocidas al estilo del campesinado más humilde, algo que dejaba estupefactos a los pinches encargados de los fogones. Wenore pudo leerlo en aquel rostro de mejillas marmóreas, sombreado por la barba de escasos días y la nariz aguileña que los labios llenos encendían brevemente: el encierro continuo dentro de aquella cámara oliendo a pergamino, la magra alimentación, la añoranza de aquel otro aire delicado transido de color y luz…. Una vez más, la punzada culpable se hizo sentir en el interior de su ser incorpóreo. Sin lugar a dudas, era asunto suyo el buscarle un aliciente aquí en Camaalot, hacerle sentir que tenía un hueco propio e insustituible siempre que gozase de discreción y decoro adecuados.
- Mi señor… no dudéis en acudir a mí siempre que lo necesitéis…. en presencia de Lady Gaynour y el resto de mis damas. Mas si un día, si ello fuera vitalmente necesario para vos, no vaciléis en comunicarme vuestro deseo de regresar a vuestra tierra de origen…. Profundamente comprendo vuestras dificultades para adaptaros aquí.
Wenore y sus dos damas jóvenes observaron cómo la tez alabastrina de su huésped se teñía de carmesí pálido al ver sus propias limitaciones expuestas de una forma tan despiadada…. ¿acaso en algún otro momento de su vida ese atisbo suyo de virilidad mal desarrollada se había visto tan inerme y desenmascarado? Sintió como una ira tamizada, serena, le iba subiendo mejillas arriba…. Bien, lo que le estaba destinado hacer al fin lo afrontaba sin resquemores. Al menos ello le abriría algún camino….
-- Mi señora y reina….asumí venir con mi hermano a Camaalot para afrontar una experiencia necesaria y nueva en el desarrollo de mi existencia. Nada más alejado de mis obligaciones como…. futuro sabio y protector de los conocimientos de mi pueblo que negarme a hacer frente a diversos ambientes y soportar la difícil adaptación que ello implique, mi noble reina…. Ello forma parte inexcusable de mi formación…. Los contrastes entre distintas forma de vivir y de entender el mundo harán que sepa valorar a los míos y cuanto les rodea de un modo más complejo y real. –Ector se preguntaba cuánto de sinceridad ante sí y cuánto de educado discurso ocultador había en sus palabras. “Verborrea…. Sé que ella se está dando perfecta cuenta…. Tiene que haber otro modo de hacerlo” -- …..no, señora, sí que podéis ayudarme…. Siempre que vuestras damas sean de absoluta confianza – Las tres mujeres intercambiaron mirada confundidas --¿Recordáis cómo mi hermano sanó allá en nuestra tierra?.... Sé que ciertas costumbres no están bien miradas aquí en estos tiempos, entre ellas la sanación practicada por nuestras doncellas, pese a que sus servicios son requeridos en los reinos que rodean el nuestro…. Me haríais muy feliz, mi reina, si me dejarais seguir instruyéndoos en ello… sí, mi señora aunque aparentemente es exclusivo de nuestras damas jóvenes, mi abuela Blodwynnn insistió en instruirme en ello desde niño pese a la oposición de Lady Nenyve , quien lo consideraba algo estrictamente unido a la feminidad. Jamás tuve ocasión de ejercitarlo allí…. Dadme, os lo suplico, la gracia de poder hacerlo aquí en Camaalot, aunque sea ocultamente…. No sólo será un inmenso bien el que me haréis, mi señora, sino que además llegaréis a ser la bienhechora más….fecunda para mi pueblo…. Haréis posible que gocen de un guardián de su saber singularmente dotado…. ¿sabéis?.... ni siquiera Blaise domina esta destreza pese a que Blodwynn era su propia madre…. Sí, mi señora, ella me inculcó el saber y la fuerza contenida en la luz emanada a través del entramado cristalino constituyente de cada gema…– Las damas jóvenes mantenían la mirada fija en el rostro mudo del joven, esperando que continuara hablando. Ector, sin embargo, sabía que no debía seguir a no ser que fuera a solas con la reina… ¿Cómo podría llevarlo a cabo sin levantar sospechas?
-Mi reina y señora… -- aunque intentó que sus ojos se posaran sólo en los de la reina, ésta advirtió como, levemente, se había escorado hacia las dos doncellas.
- Mi señor Ector….una vez más, no guardéis cuidado…. – El príncipe comprendió todo cuanto quedaba por decir. Pidió licencia, pues, para retirarse hasta un día más tarde.

Gades y Camaalot 14

Pese a las gruesas capas de pieles amontonadas bajo su cuerpo, Ector no podía huir del escalofrío que le recorría la médula y el ser interno, procedente de aquel entorno sombrío y asfixiante sin aquel suave resplandor filtrado a través del cristal de las gemas, cuya fuerza permanecía en el aire aún de noche. Desprotegido… al contrario que Galaaz, quien, acostumbrado a vivir lejos del Reino Sin Sol, dormía despreocupadamente…..Además, sus propias gemas curativas no le servirían de alivio inmediato, al no haber ni siquiera rayos de luna que pudieran filtrarse a través de ella ….De todas formas, no podía maldecir a nadie, excepto a sí mismo por convencer a su hermano para, a cambio de los consejos dados a Wenore con vistas a curar la dolencia de Galaaz, que le dejara acompañarles a Camaalot. … ¿qué otra salida le quedaba?.... ¿residir indefinidamente oculto bajo aquel mar de bruma? Aquel hielo penetrante y pavoroso nubló de nuevo su vista, ya enturbiada por la congoja…. Aquella revelación cruel pareció hacerle abrir los ojos a una realidad ¿Qué era verdaderamente real? ¿Aquella vida conocida desde que naciera, rodeado casi exclusivamente de doncellas –exceptuando a Blodwynn – con las que era impensable satisfacer su virilidad, entre espirales que ascendían cristalinas, vivas, luminosas, hundidas en el seno de un mar al que nadie osaba acercarse por considerarlo tenebroso y ultraterreno? ¿O esta pesadilla angustiosa, hediendo a humedad y tea, claustrofóbica, aplastante, de oscuridad pétrea? Casi ni le extrañó el horror que leyó en los rostros de aquellos buenos campesinos nada más llegar a Camaalot. “Un espectro….”¿Qué otra cosa sino un espectro? Alguien procedente de otro mundo, intangible y ajeno a éste centrado en asuntos guerreros y puramente supervivenciales, donde incluso el viejo consejero del Rey Supremo, pese a su astucia terrenal, era tomado por una especie de cuerpo extraño. Alguien nutrido con la sabiduría contenida en aquellos innumerables anaqueles que se desplegaban ante su vista…. Sí, no había duda de que Galaaz encajaba perfectamente aquí, pero….
Tanto el día siguiente como los posteriores los pasó recluido en la cámara, inspeccionando manuscritos, con bastante de los cuales – bien podrían ser la mitad- ya estaba familiarizado…. Reconoció a Platón, Plotino, Dionisio, Hermes, Pitágoras…. También uno iluminado con tintas multicolores y encuadernado en fino cuero, muy similar al que poseía Blaise, conteniendo los textos sagrados de la religión Galilea…. Pese a su sombrío estado de ánimo, sonrió…. ¿cómo a estos monjes seguidores del Carpintero se les podía haber ocurrido que los propios antepasados de Ector y toda su raza encontrasen letal el contacto con todo cuanto estuviera relacionado con esta religión? El propio Ector, una vez más, se había detenido en algunos textos, encontrando una similitud asombrosa entre el cáliz con la sangre vivificante del Dios-Hombre y la idea de fecundidad vinculada al caldero de Keridwenn.. Blaise le había explicado alguna vez que esa fuerza amorosa, generadora de vida, era la misma bajo distintas manifestaciones: la Madre-doncella del Salvador Galileo, Birgitt, la cara virgen de la Gran Diosa, Keridween, Macha, la Morrigu, la Diosa Madre de aquellos pueblos navegante de Oriente que se establecieron por todo el mar que los romanos llegarían a considerar suyo, Ishtar, que en tiempos remotos rigiera la fecundidad y la luna….
Ishtar.... Incluso se estremeció al evocarlos ante sí mismo en aquel entorno extraño, aquella revelación restringida sólo a los de su raza y de la que, quizá siguiendo un tabú no impuesto, jamás se le ocurriría hablar entre ellos.... Bajo el templo de la diosa luna de oriente, más allá de la gruta subterránea dedicada a la diosa de la vida y el conocimiento en la que fuera deslumbrante colonia, primero de los marinos orientales y después romana, sobre aquellas islas que marcaban el confín de lo conocido.... Allí se habían refugiado los hijos de Don que no llegaron hasta Hibernia y allí resistieron, nutriéndose de fuerza telúrica de cualidades distintas, cada una de ellas manteniendo viva una facultad o potencia diferente….Allí permanecían aún latentes y allí, al morir, eran transportados los de la raza que habitaba la Tierra Sin Sol, para aguardar en estado de letargo el tiempo en el que, suficientemente restaurados, volvieran al mundo de arriba cuando su presencia fuera necesaria..... Blodwynn.... ¿acaso ella pudiera estar sintiendo cada uno de sus pensamientos desde allí?....Sí, quizás fuera cierta la tradición guardada por los adoradores del roble.... Pudiera ser que el ser carnal de ella se encontrase allí abajo en las islas…. Mas su ser etéreo, lo que verdaderamente era Blodwynn , con seguridad se hallaba en un mundo más allá de los sentidos físicos, superpuesto a la realidad tangible, más allá del espacio restringido.... Blodwynn....dame luz.....refúgiame dentro de ti....ilumina mi camino....¡¡¡Blodwynn!!!
-- Mi señor Ector.... -- La voz sonó alterada ante la súbita palidez gélida y los ojos enturbiados de Ector.... Sí, era el mismo cabello masivo, negro azulado con crecientes vetas grises, la tez alabastrina y la sonrisa carnosa y deslumbradora.... Los ojos también rasgados, negros y abrazadores, sin embargo albergaban un fondo calculador que jamás hubiera percibido en quien fuera casi una abuela para él....
-Mi señora Gaynour -- Ector había recuperado su natural control de sí mismo. La cabellera destrenzada, como Blodwynn, Nenyve o sus paisanas.... del modo que ninguna dama aquí osaría llevarlo.... Ya cuando entraron por la puertas de Camaalot casi le había sobrecogido ver a todas la mujeres, nobles o campesinas, con el cabello asfixiado por los velos espesos y las trenzas.... como lo llevaba la propia Gaynour el día que se conocieron.
-- Mi señor... no os dejáis ver....Dame Faye no se atreve a acudir aquí, como podéis imaginar....
--Sí, mi señora, las doncellas de Camaalot observan un estilo de vida muy.....restringido – Mentalmente comparó a las jóvenes damas de la Reina y sus ropas opacas, ocres, con el ligero atuendo de sus hermanas allí en la Tierra Sin Sol. Sus ojos seguían escrutando aquellos tan similares a los suyos propios, interrogándolos.
-- Como podéis imaginar, mi señor, no va a revelar nada relacionado con su habilidad en el uso de las gemas sanadoras ante las otras doncellas....-- Los destellos comenzaron a apagarse... -- El propio Rey Supremo ha advertido a la Reina que... no ponga en práctica sus conocimientos en la corte.... el proyecto de restaurar en Bretaña el linaje de las reinas sanadoras....Ya veis.... vuestra madre Nenyve no contó con la presión de los sacerdotes galileos.... ni el propio Blaise, acostumbrado a trabajar con monjes irlandeses, no sometidos a Roma como los de aquí en Camaalot.... Afortunadamente, tengo entendido que en Irlanda – o Hibernia, como gustéis – el rey Agwissance ha insistido en la formación de su hija y heredera Isolde como futura reina sabia....ignoro si sabéis que Blaise la está instruyendo en St. Dunstan.... Lógicamente, nada de gemas o luz filtrada... algo por cierto poco asequible aquí con estos cielos plomizos. Me imagino que vuestra Faye podrá hacerse un sitio aquí mediante sus artes musicales, sabiendo cómo vuestras damas dominan el canto.... al igual que tantas otras destrezas....-- Ector sabía que ante ella no podía disimular su inquietud. Conocía bien la política de su madre con los señores francos pertenecientes a las antiguas tribus galas que rodeaban sus dominios y el intercambio entre la formación militar proporcionada a los hombres de su tierra pertenecientes a la raza híbrida menor y los servicios de sus damas. Probablemente, Nenyve había entrevisto la posibilidad de un acuerdo matrimonial con algún señor cercano al Rey Supremo. Esta posibilidad le alivió. La mirada afilada aunque cálida de Gaynour y su suave sonrisa asertiva parecían confirmarlo.
- Sí, mi señor, siendo niña la Reina Wenore, yo ya me había percatado de esa rara habilidad suya para la sanación.... Recuerdo.....como aguardaba los días de verano y primavera tardía y me pedía…. No se si sabéis que el rey Leodegranz tenía una colección de gemas singularmente talladas y joyas de una variedad que pocos reyes o jefes tribales han tenido…. ¿cómo se hizo con ellas?.... No es ello un asunto prioritario para nosotros…. Bien, la pequeña Wenore siempre solía alzar una gran amatista de forma que los rayos de sol, al atravesarla, rodearan de resplandor su cabeza. Decía que esto estimulaba su imaginación y la inspiraba para tejer la colección de tapices que en invierno abrigan nuestros muros y que, en parte, proceden de Camerlerd…. No os los voy a describir ya que vos tendréis la ocasión de contemplarlos en cuanto la estación oscura se aproxime….
Ello no hizo sino inquietar más aún a Ector…. ¿qué habría allí? ….No sólo en los tapices sino alrededor de cuanto movía la existencia de la Reina Suprema…. …. A fin de cuentas ¿qué necesidad tenía de cuestionárselo cuando precisamente para él debiera ser algo diáfano?
-- Mi señora…. aún no me habéis hablado de la función que el Rey Supremo debe encomendarme en Camaalot…. – Los ojos negros de enfrente aliviaron su agudeza, haciéndose más tiernos y abiertos…. Ector no necesitó las palabras de Gaynour, como ella ya había intuido. A través de sus fibras, el joven percibió cuanto bullía al otro lado de la cámara, aquel mundo de virilidad agresiva, ruidosa y sardónica que ya se le había manifestado levemente durante el viaje a Camaalot, justo cuando los compañeros de armas de Galaaz se les unieron y las miradas furtivas de complicidad dialogaban sobre todo cuanto su jefe no habría admitido expresar en voz alta.
- Tendréis vuestro cometido, mi señor…. No os defraudaré…. La señora Nenyve fue lúcida al dejaros venir aquí junto a la hermosa Faye y vuestro hermano, el rutilante Galaaz….a cuyo lado no sois nada oscuro, mi señor…. Vuestra naturaleza y la instrucción que recibisteis están irremisiblemente destinadas a haceros visible en la misma medida que siempre lo habéis evitado…. No, mi señor, no me malinterpretéis…. Quiero decir que es vuestro sendero el manifestaros sólo ante quien os está encomendado hacerlo…. – Los destellos de azabache de nuevo se habían tornado sutilmente afilados…. Y Ector sabía que ante ella no podía enmascarar el estremecimiento ascendiéndole desde lo más íntimo de su ser incorpóreo…. Gaynour estaba leyendo en él todo cuanto había logrado ocultarle a Nenyve.

Gades y Camaalot 13

Reconfortadas, Wenore y Clarissant dejaron la cocina. Habían tenido que despertar a una estupefacta pinche, desconcertada ante la presencia inverosímil de la Reina Suprema en su dominio, por lo cual fue milagroso que pudiera atinar al encender el fuego e ir por agua al pozo más cercano. Ector sobriamente disimulaba el frío húmedo que atravesaba el escaso grosor de su ropa hasta llegarle a la entrañas. Sus ojos, aunque cansados, permanecían demasiado despiertos para tener intención de regresar a su aposento.
-- Mi señora.... -- La tea chisporroteante le encendió el rostro pálido de un modo insólito. Wenore vio la nausea contenida en su rostro. No recordaba haber notado que hubiera antorchas en aquella tierra velada de la que acababan de llegar.
--Mi señor Ector.... deberíais haber aceptado tomar algo reconfortante.-- Bien sabía Wenore que no era cuestión de simples infusiones tonificantes. El joven príncipe comenzaba a ver las consecuencias de sus obvias ansias de "una vida de hombre". ¿Qué entendía por tal cosa? Wenore le contempló largamente, imaginando la mirada burlona del senescal Kay y la desdeñosa de otros caballeros.... ¿quiénes....?
- Mi señor, no dudéis en acudir a Lady Gaynour siempre que necesitéis cierto afecto y calor.....ya sabéis que Dame.... ¿Faye? – Ector asintió – está a su cargo.... – La mirada del hombre súbitamente se había trocado mármol negro.... "su madre.... “¿Por qué, una vez más, tenía que ser tan estúpidamente inoportuna? La ironía de Ector parecía leerle la mente.
- No lo dudaré.... ya os dije que me dio la impresión de que era como una madre para vos.... y en consideración a vuestra persona, sabré hacer lo que ella estime mejor para mis hermanos y para mí.... -- Realmente angustioso, abandonar el reino claro, vivo, lleno de fuerza, donde creciera, en busca de una réplica de aquélla que no había facilitado su desarrollo como hombre.... Ector iluminó el camino de vuelta a los aposentos de Wenore e, inmediatamente, con cortesía pidió permiso para retirarse.

Gades y Camaalot12

-- Mi señora…. – La figura oscura se iluminó a la luz de la tea, dejando traslucir un rostro marfileño donde los ojos negros de almendra parpadearon, dejándose caer entre el azoramiento y la sorpresa.
--Mi señor Ector.... Os tomamos por un miembro de la guardia haciendo la ronda nocturna.... ¿os satisface vuestro alojamiento?
-- Mi reina.... sin duda, no podríais haber acertado mejor. Un privilegio excesivo, los aposentos del antiguo consejero del rey.... una magnífica biblioteca, según creo.... Es sólo que.... sabéis, mi señora..... acostumbrado a mi residencia de allí, en mi tierra, hacerme a dormir y vivir entre piedras gruesas, opacas y descoloridas puede ser muy lento.... Por cierto, no sé si Lady Nenyve os contó que allí en nuestra tierra ocupabais mis estancias, algo que es especialmente honorable para mí.... -- La visión de aquella figura oscura y delicada hablando con Lady Nenyve en aquel espejo reapareció entre los pensamientos de Wenore.... Un golpe de pudor penetrante la azotó... Aquellos cobertores de fina, inusual textura, que habían cubierto su piel desnuda durante aquellos fías insólitos estaban impregnados de las pulsiones vitales de aquel hombre que tenía delante.... ¿por qué debiera haberlo mencionado justamente ahora? No se atrevió a mirar hacia el fondo de aquella mirada, de nuevo impasible tras superar el inesperado encuentro con Wenore y Clarissant. Él sabría que estaba intentando escudriñar en su ser interior....
-- Lady Gaynour eligió esa habitación para nosotros dos. Dame Faye duerme en su aposento junto con el resto de las damas jóvenes.
--.... Gaynour....Wenore.... ¿no significan lo mismo.....hada blanca?.... --La reina controló el temblor de sus fibras... "Wenore.... hada blanca ¿qué haces aquí?".... Los ojos de Ector comenzaban a sonreír con dulzura.... "….como Gaynour" ¿Realmente era ella consciente de qué clase de hombre había introducido en el mundo del Rey Supremo y su compañía?
- Lady Gaynour me comentó que intentaría encontrarme una función adecuada aquí....Según ella, no puede dejar este asunto en manos del senescal, el hermano del rey....
Una vez más, mientras caminaban, el viento húmedo y fresco azotándoles el rostro, Wenore comprobó cómo el joven parecía ir dando respuesta a las preguntas que iban surgiendo en su mente.... "Muy propio de Gaynour.... Kay lo humillaría desde el principio.... como lo hizo con el propio sobrino de Art. Sin lugar a dudas, haría de Ector un sirviente en manos de gente ruda y despiadada, sin tener en consideración la presencia de Dame Faye y Galaaz como huéspedes míos...." De repente recordó que la imagen del vigoroso cuerpo tostado del muchacho había surgido inesperadamente aquella noche, ante la mirada vidriosa de Art, mientras que éste la tomaba a ella misma ... Ya estaban llegando a la choza de piedra y techo de paja de servía de cocina....
-- Mi señora, os agradezco vuestra bondad pero sería más beneficioso tanto para vuestra reputación como para la mía que yo permaneciera aquí afuera....
--Mi señor Ector, tened por seguro que se os encontrará una responsabilidad de acuerdo con vuestra dignidad y aptitudes.....
- No dudéis de que sé que será así, mi reina y señora....

martes, 17 de junio de 2008

Gades y Camaaot: Capítulo 11

No fue aquella una noche como las anteriores – aunque tampoco como la había soñado a lo largo del día. La adormilada Wenore llevaba ya quizás casi dos hors yaciendo en aquel lecho que sus doncellas se habían esmerado en componer, mezclando la paja con hierbas aromáticas y bienhechoras de acuerdo con las instrucciones de Lady Gaynour.... Eran quizás los efluvios del romero y la lavanda lo que habían arrasado sus sueños, dando forma y tacto a aquella ruda mano amplia que se apoderaba de su seno, que sintió húmedo al erizarse ante el roce áspero y familiar de aquella barba, el cual despertó una calidez abierta a través de toda ella , preparándola para recibir aquella plenitud viril en su interior, llenándola a fondo, arrancándole gemidos entre-cortados.... que se helaron ante el ceño fruncido y extrañado que tenía ante sus ojos, aquella mirada que volvía a ser vidriosa y ausente y que, una vez hubo aliviado su urgencia, quedó yerta, muda, tendida junto a Wenore mas no con ella, cuyo ser también sintió pesado, extraño, ausente....
-- ….Mi señora, disculpad mi brusquedad.... -- la voz sonó opaca, casi vacilante --.... .... – Ni él mismo era capaz de hallar palabras.... Wenore experimentó cierta compasión por alguien tan vulnerable en cuestión de momentos.... Quiso olvidarlo todo y estrecharlo, calmarlo.... pero sabía que esto no le correspondía a ella ahora.... El latido le pesaba dentro mientras que la respiración tensa y dormida de él la envolvía... Cuando volvió a abrir los ojos el lecho estaba vacío en medio de una noche aún lejana del amanecer. No, no podía dejarse a sí misma allí..... Se deslizó despacio….¿dónde hallaría fuego para iluminarse?.... Sí, debía ser silenciosa pese a que no necesitaba pasar a través de la estancia de sus doncellas…. Lo haría por la entrada utilizada por el rey para acceder a la cámara de la reina…. La mirada ausente, de vidrio claro, acechó de nuevo el ser aterido de Genere…. No, no podía internarse allí hasta que el día rompiera…. Ni acudir a Clarissant….. y Lynet, es aún tan chiquilla…. No, Clarissant, después de todo, es familia directa de Artorius y descubriría la verdad…. Allí, a través de la ventana, divisó una luz desplazarse…. ¿un centinela de guardia? …. No debía verla sola, sin peinar, vestida a toda prisa…. Irremediable-mente, la pobre Clarissant tendría que sacrificar su sueño….una bendición que lady Gaynour tuviera derecho a su propia estancia junto a otras doncellas jóvenes….
--Mi señora…. yo misma os traeré la infusión de las cocinas…. ¿cómo vais a mostraros allí abajo?
--Mi querida Clarissant, hay pinches de cocina que jamás me han visto en su vida, ni siquiera en las ceremonias anuales…. Además necesito respirar el aire fresco de la noche…. Buscadme la capa forrada de pieles…. – Se felicitó a sí misma por lograr reprimir el temblor húmedo que comenzaba a brotarle en los ojos – Parece que ese centinela de la tea se aproxima…. aprovechemos para que nos acompañe….
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Gades y Camaalot: capítulo 10

Se hallaba allí con ellos, en la gran estancia circular donde el Rey Supremo se sentaba con su compañía de caballeros para deliberar diversos asuntos y en la que también se reunían las dos grandes cortes a mediados de verano y finales de año. Sobre su fino atuendo azul berilo, las negras trenzas en las que la plata cada vez se hacía más evidente bajo el velo con el que las mujeres de su edad ocultaban lo que antaño deslumbrara.... como si conociera a los príncipes y a la joven dama desde mucho antes, marcando, algo obvio en ella, la pauta de una conversación casi en susurros....
- Mi rey y señor, el príncipe Galaaz del Lago y su hermano el príncipe Ector De Maris.... – Wenore había dirigido una rápida mirada hacia aquellos amplios ojos negros y escrutadores que seguían sonriendo a fin de hacerles forzar una pausa para permitir que la Reina Suprema ejerciera su papel de introductora y anfitriona. Wenore desplazó su mirada hacia la del rey, amable aunque inquisitiva, tal como la había sentido ante ella un rato antes. Se percató de que Lady Gaynour también la estudiaba : los labios carnosos, intensos, aún bellos, desplegados en una cálida sonrisa que encendía la tez translúcida, milagrosamente lozana, y el porte imponente a pesar de su constitución más bien menuda.
-- Mi señora Gaynour…. – Los ojos intensos estudiaron cada rasgo de Wenore, cada matiz de su mirada y gestos, comprobando el efecto operado en la reina por el retiro que ella misma había gestionado.
- Mi dulce señora... – Wenore sabía que debía leer en su silencio cuanto quería darle a entender.... Lady Gaynour contemplaba el interés de Artorius mientras éste conversaba con el joven Galaaz.
- Mi señora... – su voz se había hecho un susurro. – No le habéis presentado aún a Lady Faye.... – Wenore hizo acopio de fuerza interior para contener aquella marea púrpura que le subía a la mejillas, reprimiendo su ira contra aquella cuya sutil capacidad de intimidación había bloqueado la diestra desenvoltura que se esperaba de una reina....
- Mi rey y señor, la gentil Lady Faye ha tenido a bien brindarnos su compañía a fin de ofrecer su sabiduría como sanadora así como.... – Estaba a punto de referirse a la necesidad de Ector de tener ceca a alguien de su entorno en un ambiente tan ajeno a su naturaleza. Afortunadamente, rectificó. – …. su luz....--La joven había sonreído de forma franca y radiante. Sí, ésa era la palabra: Faye era algo más que el centelleo chispeante de lo joven. El rey la había saludado de forma cortés y atenta.... ¿acaso había descubierto un destello de admiración respetuosa en los ojos grises y vidriosos que viera antes? “Ella sí que parece una reina”. De nuevo volvió la mirada hacia la silenciosa figura de Ector, ya sin velo pero conservando la severidad que proyectaban el atuendo oscuro y su contraste con la tez pálida. El sabio tino habitual en Lady Gaynour la llevó a dirigirse hacia él para reanudar una conversación iniciada antes de que Wenore entrase…. Sobre lo mismo que ésta ya conocía de él…. Mas nada relativo al conocimiento que él poseía sobre la gema…. ¿por qué sólo a ella la había hecho partícipe de esto….acaso haciéndola compartir un secreto sagrado?.... Blaise…. Su nombre surgía entre la conversación…. Quizás él fuera el maestro de Ector… ¿Su posible sucesor en la tierra sin sol? … Los rasgados ojos de azabache del joven se fundían con aquellos amplios y oscuros de mujer madura…. ¿reflejándose en ellos?.... Quizás fuera el contraste con la piel marmórea lo que producía tal efecto…. O probablemente aquella infusión que se había hecho preparar para relajar su tensión….
- Mi señora Gaynour, os ruego que aviséis a mis damas para que me ayuden a retirarme….